miércoles, 25 de junio de 2014

  Noche: Como tantas otras de insomnio, no bebo café, no leo como antes, mis juguetes deben estar enterrados en el patio de mi antigua casa donde no jugué. 

La excusa: " El arte puede ser mas arte"  La pintura cuenta lo que sus dueños jamás contaron. Aquellos monstruos que aterroriza(n) ron nuestras vida. Aquellos que nos quitaban el sueño, las ganas de correr rápido a encender la luz, aquellos que nuestros hermanos aseguraron que existían (Monstruos menos peligrosos que los conocemos cuando adultos) que nuestros padres (no siempre) nos protegían, los de los dientotes afilados, los de las manos largas, peludos, los de los ojos saltones, que se escondían en lugares donde los adultos jamás los verían, en el armario, dentro del excusado, debajo de la cama, en los cajones, esperando nuestra valentía. 
El poder de los niños jamás debe ser echado de menos, luchábamos contra cosas realmente amenazantes, vivas, tan vivas como nosotros (y eso es lo que importa no?), cosas desconocidas, cosas que alguna vez se escapan a molestarnos un ratito...

Se oyen ruidos en el armario, quien tocara a esta hora.... ?

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